En esta ocasión he recurrido a estas palabras, no por que vaya hablar de religión, -de donde han sido extraídas-, sino por que quiero hablar sobre algo relacionado a una de ellas. Sin embargo, me pareció interesante -en el aspecto sonoro- utilizar las cuatro en conjunto, así de simple soy -en momentos- :P.
Una vez realizada una pequeña introducción, que más bien parece un texto de carácter aclaratorio, me dispongo a externar mi MUY personal opinión -como siempre- :).
La palabra que me motiva a escribir es la Omisión, así es, se trata de algo que se encuentra muy ligado a mi existencia. Para hacer esto más entendible seré lo más explicito posible, o al menos eso intentaré.
Para algunas personas les es irrelevante hablar de situaciones como estas, sin embargo, me parece interesante hacerlo, dado que he me cuestionado cual ha sido el impacto -costo- de mis omisiones.
Mi memoria me permite encontrar diversos instantes, momentos, en los que consciente de lo que se tiene que "hacer", he optado o simplemente dejado de realizar. Han sido situaciones tan sencillas como el conocer la solución al problema más complicado de la clase u otras tan complicadas, sobre todo aquellas relacionadas con el aspecto personal y afectivo.
A usted lector, le puede resultar obvio, cuales son las omisiones que pudieran haber implicado un "costo" enorme para mí persona. Sin embargo, la divagación me lleva a caer en la duda y llegar a pensar en el "hubiera", que de nada sirve.
Ahora bien, algo que no puede pasar inadvertido es que, una omisión no es un "evento" de corta duración. No, en ocasiones se vuelve un comportamiento rutinario de larga duracion -quizas de por vida-, hablando en caso muy particulares. Siento que he llegado a este punto... ¿permitiré que continue así?... no lo sé.
Después de un pequeño lapso de profundo silencio y reflexión, no encuentro más palabras para continuar con este texto. Al parecer he quedado bloqueado, a pesar de esto, creo que "compartido" la esencia de lo que pienso al respecto. Espero posteriormente volver hablar de ello.
Hasta la próxima :).
Una vez realizada una pequeña introducción, que más bien parece un texto de carácter aclaratorio, me dispongo a externar mi MUY personal opinión -como siempre- :).
La palabra que me motiva a escribir es la Omisión, así es, se trata de algo que se encuentra muy ligado a mi existencia. Para hacer esto más entendible seré lo más explicito posible, o al menos eso intentaré.
Para algunas personas les es irrelevante hablar de situaciones como estas, sin embargo, me parece interesante hacerlo, dado que he me cuestionado cual ha sido el impacto -costo- de mis omisiones.
Mi memoria me permite encontrar diversos instantes, momentos, en los que consciente de lo que se tiene que "hacer", he optado o simplemente dejado de realizar. Han sido situaciones tan sencillas como el conocer la solución al problema más complicado de la clase u otras tan complicadas, sobre todo aquellas relacionadas con el aspecto personal y afectivo.
A usted lector, le puede resultar obvio, cuales son las omisiones que pudieran haber implicado un "costo" enorme para mí persona. Sin embargo, la divagación me lleva a caer en la duda y llegar a pensar en el "hubiera", que de nada sirve.
Ahora bien, algo que no puede pasar inadvertido es que, una omisión no es un "evento" de corta duración. No, en ocasiones se vuelve un comportamiento rutinario de larga duracion -quizas de por vida-, hablando en caso muy particulares. Siento que he llegado a este punto... ¿permitiré que continue así?... no lo sé.
Después de un pequeño lapso de profundo silencio y reflexión, no encuentro más palabras para continuar con este texto. Al parecer he quedado bloqueado, a pesar de esto, creo que "compartido" la esencia de lo que pienso al respecto. Espero posteriormente volver hablar de ello.
Hasta la próxima :).
0 comentarios :: ... Pensamiento, Palabra, Obra y Omisión
Publicar un comentario