Sube y Baja

En el pasado mes de octubre fueron lanzadas las mas recientes versiones de diversas distros de GNU/Linux. De entre las que destacan las de Ubuntu y OpenSUSE, en su versiones 7.10 y 10.3, respectivamente. De la primera pre-ordene un par de discos, de la segunda fue por medio de descarga de bit-torrent.

Por cuestiones de destino, tuve en mis manos con diferencia de un par de dias, los discos de estas dos maravillas del mundo Linux. Sin embargo, el trabajo y otras cosas más, no me ha sido posible evaluarlos de manera muy profunda. Sin embargo, con lo que he probado me es suficiente para dar una breve opinión sobre ellas. Pero vamo por partes



OpenSUSE

La distro del pequeño reptil es una de las primeras que probé recien inicia a incursionar en el mundo Linux. Desafortunadamente, esas versiones me resultaban decepcionantes dado que se concentraban en KDE y otros tantos pequeños detalles que no me convencían lo suficiente, como para mantenerla instalada.

Ahora y después de un par de releases, me di la oportunidad de probar de nueva cuenta. Para mi agrado, me encuentro con un mayor soporte a GNOME, un centro de control muy completo y un instalador de paquetes muy bueno. Esto a grandes razgos, haciendo de mi experiencia de uso gratificante. Me ha resultado muy agradable tanto técnica como visualmente hablando. Lo único que encontré un poco exasperante, es el fragmentador de disco duro, que me obligo a decir una que otra maldición, pero de ahi en más todo marcha de buena manera.

Para finalizar, puedo decir que en este release 10.3 he encontrado un SUSE de mi agrado... y ahora sí se quedará en mi dusco duro :P.




Ubuntu

Una gran distribución en muchos sentidos. Me "enamoré" desde el primer instante que la probé, si no mal recuerdo era la 5.10.

Se convirtió en distro Linux por default. Era la única que residía en mi disco duro -bueno, sin contar el Win-, siguiendo de manera fiel cada nueva versión.

Como en líneas anteriores comenté, realice una pre-orden del Gutsy. Alrededor de dos semanas después del lanzamiento de la misma, un día al regresar del trabajo me encuentro con el esperado paquete. Cual niño con juguete nuevo me dispusé a probarlo, al diablo con todo lo demás Ubuntu había llegado.

Reinicie mi ordenador con el LiveCD en su lugar, arranco el menu de costumbre, realice unos ajustes menores y enter para que iniciara el sistema. Desde ese punto las cosas no fueron de la mejor manera, pues el usplash no se veía :(. Pero bueno lo consideré un detalle menor.

Ya una vez con el sistema andando, me tope con "problemas comunes", como la frecuencia del monitor que para esta versión ya conocía la forma de resolverlo. Pero quise intentar con la nueva herramienta gráfica de configuración de tarjeta y monitor. Lamentablemente no funcionó, recurriré a la línea de comandos, pero fue inútil.

A pesar de ello lo instalé, continuando con la exploración del mismo. Seguí encontrando pequeños detallitos que no me agradan para nada. No lo puedo creer, ha sido realmente una decepción enorme dado el afecto que le tengo a la distro.

Conclusión

El titulo no podía ser más descriptivo, mientras una distro sube, la otra baja en mi percepción como usuario final. Dos factores han sido muy importantes para este movimiento, el primero ha sido el buen soporte a Gnome por parte de SUSE y el segundo es el problema de hardware con Ubuntu -algo inpensable-.

Con esto OpenSUSE es por el momento mi GNU/Linux por default y Ubuntu tendrá que esperar a su siguiente versión para ver si recupera su "trono" en mi disco duro. Hasta la próxima :P.